CANNONBALL ADDERLEY - Somethin' else (1958)
Adoro este disco, aunque reconozco que mi relación con el jazz es algo caótica y quizás un poco...desestructurada. Me gusta el jazz, o quizás un cierto tipo de jazz, casi siempre cercano al soul, al blues, al funk o a los sonidos latinos. Me gusta el cool jazz, mucho del swing de las big bands y la bossanova, de la que hablamos bastante por aquí. Y me encanta este Somethin' else, sus atmósferas humeantes de descuidada decadencia, sus ritmos contenidos , su rancio sabor a jazz con algún toque de perezoso blues, y esos vibrantes y embriagadores vientos, trompeta y saxo alto, que intercambian protagonismo y reparten vitalidad sonora en perfecta armonía. De verdad, es un auténtico placer dejarse embaucar y atrapar por esas sinuosas e intrincadas figuras sonoras, que dibujan la deliciosa trompeta de Miles Davies y el cálido saxo de Julian Cannonball Adderley, adornadas por las misteriosas y elegantes notas del piano de Hank Jones.
Y es que estamos hablando de uno de los grandes discos que ha dado la música jazz. Cannonball Adderley en el saxo alto, Miles Davies a la trompeta, Hank Jones al piano, Sam Jones al bajo y Art Bukley en la percusión. Un equipo casi perfecto, proveniente de diversas ramas del jazz, hard bop, cool jazz, swing y hard funk que conseguirían una química especial y la sintonía adecuada para crear esta obra maestra, en aquellas mágicas sesiones de 1958, para el sello Blue Note.
Autumn Leaves abre el disco de una manera espectacular. La verdad es que casi no se que deciros de esta maravilla, a parte de que es maravillosa. Me enganchó desde la primera vez que la oí en un recopilatorio de Blue Note y es uno de los temas que tienen la culpa de que me fuera acercando al jazz. Una deliciosa melodía que se apodera de tus sentidos sigilosamente y que de forma perezosa se va desarrollando, elegante, seductora y sublime, en un constante y evocador diálogo entre trompeta, saxo, y piano, que parece no querer llegar hasta su apoteósico climax final. Once minutos. Si, habéis leído bien once ensoñadores minutos, que desembocan majestuosamente en otra pequeña joya: Love for sale, un tema de Cole Porter que eleva el ritmo del disco, con una mezcla de swing y blues con algún toque latino que hace que de repente nos veamos inmersos en una atmósfera noctámbula de cafetín destartalado, repleto de pasiones contenidas a punto de desatarse. Una atmósfera que continúa con el vibrante tema que da título al disco, Somethin' Else, un tema escrito por Miles Davis, donde el saxo de Cannoball Adderley y la trompeta de Miles Davies serpentean voluptuosas en un sinfín de cabriolas sonoras que atrapan irremisiblemente tu atención e impiden que el ritmo decaiga hasta llegar a otro de mis temas favoritos del disco, One for Daddy-O, un tema del hermano de Cannoball Adderley, Nat Adderley, y Sam Jones, que desprende un intenso aroma a blues, con un cadencioso ritmo, un desgarrado saxo y una nostálgica trompeta, ideales para que aquellas pasiones contenidas de las que hablábamos antes, se preparen para desatarse definitivamente con esa otra deliciosa y tierna melodía, que brota del cálido saxo de Adderley en la fantástica Dancing in the Dark. Un final apasionado y apoteósico para la versión original del disco, que sin embargo en su reedición en CD se ve ampliado con la festiva y groovy Bangoon de Hank Jones.
Todo un clásico, que puede ser una buena forma de acercarse al mundo del jazz moderno.
Publicado el 02/12/2006 en Sensaciones Sonoras en La Coctelera
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